

EL LLAMADO

“No me han elegido ustedes a mi, soy yo quien los ha elegido” (Jn. 15,16).
¿Llamado yo? ¿Llamado tú? ¡Claro!
Lo primero que tenemos que decir es que la vocación sacerdotal, como lo es un llamado especial, parte de alguien que te mira diferente y que te habla diferente, y que este alguien, que te mira diferente, es Jesús.
LA VIDA DEL SACERDOTE
